
Como Frailes Franciscanos, cuativados por el ejemplo y testimonio de Francisco, queremos con él, consagrarnos a Dios de corazón.
"Son vervaderamente de corazón limpio los que desprecian lo terreno, buscan lo celestial y nunca dejan de adorar y contemplar al Señor Dios vivo y verdadero con corazón y ánimo limpio".
No hay comentarios:
Publicar un comentario